Fotos: INAH (Daniel Santaella / Ulises Leyva) y Adriana Luna
Arqueólogos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) encontraron el Palacio Blanco de la Lectura, los mayas le habían ocultado a propósito en la ciudad de Ek’ Balam, ubicada a 10 kilómetros de Valladolid en Yucatán. Ahora es uno de los edificios prehispánicos más conservados.
“Estaba cubierto a propósito, por eso se conservaron sino no las veríamos así. Al otro lado de la escalinata había una fachada muy parecida, pero con el derrumbe se cayó. Esto afortunadamente para nosotros se conservó porque estaba cubierto, casi intacto”, nos comentó la arqueóloga Leticia Vargas de la Peña.
Con sumo cuidado y atención, manos expertas limpian y restauran los vestigios. Los arqueólogos se maravillan porque todos los días están descubriendo detalles novedosos de las construcciones, cultura e historia maya. Los mexicanos somos afortunados de que este palacio indígena se encuentre prácticamente íntegro, aunque fue construido en el año 770. Le pertenecía al gobernante Ukit Kan Le´t Tok (conocido como el padre de las cuatro frentes de pedernal). Él era el soberano de Ek’ Balam.
“Hemos tenido una gran información epigráfica, afortunadamente”, explicó el arqueólogo Víctor Castillo Borges, al tiempo de reconocer que se la pasan emocionados con todos los detalles novedosos que encuentran al limpiar las piedras.
Ukit Kan Le´t Tok gobernó durante unos 40 años. Al morir, su hijo ascendió al trono. ¿Cómo lo sabemos? Los expertos han encontrado piedras con fechas y detalles enriquecedores. Narran la vida de los gobernantes mayas, sus gustos y costumbres ancestrales en esta ciudad que tendría una extensión de entre 12 a 15 kilómetros a la redonda.
“Tenemos los datos en murales, en piedras, en vasijas. Gracias a ello sabemos los nombres de los reyes y las fechas que reinaron, de otra manera no lo podríamos saber”, añadió Leticia.
Acompañando a los arqueólogos del INAH, en esta Acrópolis se encuentra un grupo de jóvenes originarios de San Luis Potosí, licenciados en Conservación y Restauración de Bienes Culturales.
“Es un sitio importante, nunca me había tocado estar en excavación, entonces estar muy cerca de las cosas que se van descubriendo es súper interesante”, dice Michel, con ojos iluminados de emoción.
Múltiples vasijas, pinturas y escritos se han localizado aquí, reflejando que era tierra de artistas.
“Trabajar a la par con los arqueólogos y que nos den la oportunidad de formar parte (del descubrimiento histórico). Tampoco había estado en excavación, y, ¡está padre!”, agrega Liliana.
Los mayas han ocultado por siglos enormes tesoros y ahora se develan a la humanidad. Se recuperaron artesanías tipo estuco y construcciones del periodo Puuc. En Ek’ Balam sorprende una gran mezcla de estilos arquitectónicos que pueden verse en otras partes del mundo (Río Bec, chenes).
“¡Había unos escultores realmente increíbles! El primer rey tuvo tanto poder que pudo tener a su servicio a los artistas más importantes: talladores, escultores, constructores, arquitectos, diseñadores de joyas”, coincidieron los arqueólogos.